Las mujeres tenemos más enfermedades autoinmunes, ¿Por qué?
Cuatro de cada 5 pacientes con enfermedades autoinmunes son mujeres.
Un ejemplo, es el Lupus Eritematoso Sistémico, donde la proporción es de 9:1, o sea, por cada 10 personas diagnosticadas con la enfermedad aproximadamente, 9 son mujeres y 1 es hombre.
Otro ejemplo es la enfermedad de Sjögren donde la proporción es de 19:1. Las razones más estudiadas han sido las hormonales, claramente, pero hoy vamos a hablar de las
razones inmuno-genéticas.
Lo primero que hay que saber es que, en mamíferos, existen dos genotipos: XX y XY. Las
hembras tienen dos cromosomas X y los machos solo uno. Se ha visto que la dosis del
cromosoma X es un factor de riesgo para padecer enfermedades autoinmunes.
¿Cómo la dosis? ¿Se pueden tener más cromosomas X de lo normal?
Sí. Existe la enfermedad de Klinefelter, donde el paciente es fenotípicamente hombre, pero sus cromosomas son XXY, o sea, tienen un cromosoma X extra. El patrón hormonal coincide con el de un hombre también, y por eso es interesante saber que estos pacientes tienen más riesgo de padecer enfermedades autoinmunes que se presentan predominantemente en mujeres (1).
En palabras simples, hombres con cuerpo y hormonas de hombre que tienen un cromosoma X de más, también presentan más enfermedades autoinmunes comunes en las mujeres.
Ahora, un poco más científico.
Ya dijimos que los hombres tienen genotipo XY y las mujeres XX, ahora hay que saber que, para equilibrar la expresión génica entre mujeres y hombres, las células femeninas "apagan" epigenéticamente uno de sus dos cromosomas X.
Este proceso se llama inactivación del cromosoma X y es controlado por una molécula llamada Xist (un ARN largo no codificante).
Más fácil, una molécula llamada Xist actúa como un interruptor, uniéndose a uno de los
cromosomas X en cada célula de las mujeres y lo mantiene "apagado" para que no produzca copias extra de los genes en ese cromosoma. De esta manera, tanto los hombres (con un cromosoma X) como las mujeres (con dos cromosomas X pero solo uno activo) tienen niveles similares de actividad génica (2).
Autoinmunidad, genética e inmunología.
Una característica de muchas enfermedades autoinmunes es el desarrollo de anticuerpos contra células y tejidos propios, por eso se llaman enfermedades autoinmunes. En estas enfermedades nuestro propio sistema inmune nos ataca porque nos deja de reconocer. Es como si un día llegaras a tu casa disfrazado, tu perro no te reconoce y te muerde.
Eso le pasa al sistema inmunológico. Un día, mientras hace su revisión de seguridad, deja de reconocer a las células propias y hace todo por eliminarlas.
Esto puede pasar por muchas razones, pero genéticamente hablando, hay genes particulares como el TLR7, que cumplen con los siguientes puntos:
Tienen que ver con la respuesta inmunológica
Son específicos del cromosoma X
Pueden escaparse de la inactivación epigenética
Podrían contribuir al desarrollo de enfermedades autoinmunes.
Un artículo como ejemplo.
En el estudio publicado por Dou y colaboradores (2), exploran un poco más a la molécula Xist, que como ya dije antes, no está expresada en los hombres. En este artículo hacen experimentos con ratones porque obvio que no sería ético provocarles enfermedades autoinmunes a personas, pero también hablan de estudios hechos en humanos.
En este artículo también mencionan que se han llevado a cabo estudios donde revelan que 30 proteínas encontradas dentro de Xist pueden ser blanco de auto-anticuerpos. O sea, que la molécula Xist que solo está presente en mujeres puede ser atacada de 30 formas diferentes.
Importante enfatizar que todas las células del cuerpo de una mujer tienen a Xist que recubre y mantiene inactivo a uno de los cromosomas X (conocido como cuerpo de Barr). Cuando el tejido se daña y las células mueren, las moléculas Xist de esas células muertas pueden quedar expuestas al sistema inmunológico. Y entonces, ahora sí, 30 posibilidades de autoinmunidad.
Además, según hallazgos recientes, cuando una persona tiene rasgos genéticos que la hacen más propensa a enfermedades autoinmunes y sufre lesiones repetidas, las moléculas Xist pueden empeorar la inflamación en los órganos afectados. Esto puede activar diferentes tipos de células inmunitarias, aumentando el riesgo de desarrollar enfermedades autoinmunes graves.
Aquí les dejo una imagen que resume el artículo.

Conclusión
Hay muchas razones para la autoinmunidad y gracias al avance de la ciencia, se sabe que la inmuno-genética es una de ellas.
Me gusta saber esto, sobre todo para quitar esta idea machista de “las mujeres tienen más
enfermedades autoinmunes porque son más nerviosas”, porque, aunque el estrés sí pueda formar parte de la enfermedad, no es la única ni más importante razón.
Referencias
1. MJ; SOAD. Associations between Klinefelter’s syndrome and autoimmune diseases: English national record linkage studies [Internet]. U.S. National Library of Medicine; [cited 2024 Nov 11].
2. Dou DR. Https://www.cell.com/action/showPdf?pii=S0092-8674... [Internet]. 2024 [cited 2024 Nov 11]. Available from: https://www.cell.com/action/showPdf?pii=S0092-8674(20)31012-6
Escrito por: Fernanda Montes de Oca
コメント